El tema radica en la exaltación de las irregularidades de la forma existente, se entretejen en múltiples direcciones como un papel doblado irregularmente que envuelve un espacio. Nace desde el exterior con una caja que levita y se lanza contra el acceso generando el ingreso, es una envoltura de un rojo profundo, la intensidad se apaga al pasar por el túnel, todo se vuelve totalmente manso y puro, es un absoluto blanco que hace un ”lapsus”, al ingresar éstas  líneas dóciles y puras poco a poco se van transformando y rompiendo para rematar al interior en un gran caos envolvente de tonos grises y rojizos. 
                                                
Aquí todo es exaltación, no hay muros ni techos sino una cubierta quebrada y brillante que reflejan imágenes segmentadas tanto los espacios como la cabina; los muros y los muebles son de un rojo potente y brillante, los muros son de imágenes quebradas acentúan el concepto.